Por Rick Joyner
Rusia será el epicentro del mayor avivamiento que el mundo haya visto hasta ahora. Por eso, el alma de la nación será trascendente, superando muchos de los grandes problemas de los tiempos y ayudando a muchas otras naciones a hacer lo mismo.
Antes de esto, Rusia tiene un camino muy difícil por delante, con algunos eventos trágicos que se avecinan. Eventualmente, el camino se volverá más suave. La gracia de Dios se extiende hacia Rusia, y él es quien puso a Putin. A veces se tambalea al borde de la anarquía, pero crecerá en estabilidad y sabiduría y será una gran líder de naciones hasta el final. El Señor ha preparado grandes líderes para Rusia en el gobierno, los negocios y la iglesia. Todos ellos serán estadistas en sus campos, desarrollando un intercambio sólido y sabio con sus homólogos en otras naciones para su beneficio mutuo. Tal intercambio es esencial para la prosperidad de Rusia, y debe aprender a resistir las fuerzas del aislamiento y la falta de visión. Alemania, Polonia y Rusia crecerán en amistad para su mutuo beneficio y fortalecimiento.
El destino de Rusia es preceder al mundo en lidiar con algunos de los problemas que enfrentará el mundo entero. Oren por sabiduría de lo alto para mostrarles el camino para construir sobre un fundamento que pueda resistir las presiones por venir. Cuando Rusia está pisando tierra firme, el mundo estará más seguro y podrá ayudar a sacar a muchas otras naciones de las arenas movedizas. El potencial del alma rusa es un gran tesoro. La mayor amenaza para Rusia no es la resurrección del comunismo, sino el surgimiento del fascismo.